Blog poesía La luz de tu Faro

En memoria de Sara Álvarez, con Amor, devoción y ternura infinitas. Absorbí tu esencia, y ahora vives en mi poesía. Te devuelvo la vida con mis versos.

miércoles, 29 de agosto de 2012

Deiforme











Mi rostro sabrá escupir la lluvia como las piedras.
Suttree, Cormac McCarthy

Crece el musgo entre las sombras
y yo también.

Puedo ver el cielo corrugado de nubes,
nimbos orlados de hulla
que flotan en la diversidad de la noche
como un avispero titilante, siempre torvo;
el verdín de la lluvia sesgada de avaricia
y su pulcra letanía;
espolones de una luz desmenuzada
en un crepúsculo de similor
que desmiente el celaje de la bruma.

y la lluvia que te obliga a acorullar los párpados
como remos invidentes o un pez sin celosía,

y la luz cenicienta que se frota con las vetas del mármol,

y los faroles temulentos como colas de espermatozoide
o chicles pegados al asfalto,

y la voz que renuncia a la voz;
y la palabra que abroga la palabra;
y el silencio occipital como una ardilla en los labios
que salta de sílaba en sílaba blandiendo su añagaza.

Dios bosqueja mares asimétricos y fósiles de añil,
gametos de un solo tajo.

El sol es un pájaro enteco de escápulas doradas
que se explaya en la prolijidad del horizonte
como un ojo errático y deiforme.

© Óscar Bartolomé Poy. Todos los derechos reservados.

1 comentarios:

Ío
7 de septiembre de 2012, 0:44

Es muy diferente leer de día y leer de noche, prefiero esta última, sobre todo ciertos poemas, como este tuyo, que me llevan más allá de la propia palabra, poemas que se duelen y duelen, "y la voz que renuncia a la voz", el sol enfermo, la hulla (preciosa palabra), la lluvia que no cesa y los faroles borrachos que no saben qué alumbrar.
"y la palabra que abroga la palabra", esos mares que un día fueron azules
Es muy muy hermoso, Óscar.
Gracias
Abrazos

Ío

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