Blog poesía La luz de tu Faro

En memoria de Sara Álvarez, con Amor, devoción y ternura infinitas. Absorbí tu esencia, y ahora vives en mi poesía. Te devuelvo la vida con mis versos.

lunes, 7 de marzo de 2011

Trébol rojo



en la otra orilla de la noche
el amor es posible

'El olvido', Alejandra Pizarnik



¿Podrás contar con los dedos de una mano
los segundos que separan tu relámpago de mi trueno
si un rayo intima este beso en penumbra –musgo fresco–
y en el canto del grillo no repican ya los élitros?

En el calostro de la noche, cuando el plaustro
de Febo enjaeza las crines del ocaso –trébol rojo–,
me dejo acunar por esos labios undívagos, de barcarola,
donde el mar encinto arrulla delfines
y el amor se funde en una crestomatía de lenguas.

Love se escribe con cuatro pétalos,
como Amor, como Sara.
Siempre con mayúscula inicial;
siempre con acento de fresa.

© Óscar Bartolomé Poy. Todos los derechos reservados.

9 comentarios:

Anónimo dijo...
7 de marzo de 2011, 14:00

Amor se escribe con cuatro letras, pero debe sentirse con el alma.Así es tu sentir...único e inconfundible.
Besos Oscar.

Cita Franco
7 de marzo de 2011, 15:02

Cuatro letras magicas, íntimas, tuyas... gracias por compartirlas, y por seguir aleccionándome.
Besos
Cita

Isabel Moncayo Moreno
7 de marzo de 2011, 15:07

Me parece un poema más desenfadado de lo que acostumbras, me han gustado especialmente los dos versos en los que después encierras entre guiones,así como la última estrofa que está cargada de ternura y color y por supuesto, amor.

Un abrazo.

Pd: siento lo ocurrido y mi inoportuna ausencia. Y agradezco que hayas sido todo un caballero( cosa que ya sabía de ti) por no haber entrado al trapo.

Tatiana Aguilera
7 de marzo de 2011, 18:59

Óscar, eres de mis poetas preferidos. Admiro tu versátil vocabulario, y esa infinito amor que se percibe en cada verso que ofrendas a los ojos.
Un abrazo.

lunilla
7 de marzo de 2011, 20:26

un abrazo mientras refresco mi alma, y auno energias, para enfrentar estos tiempos nuevos,

Otro abrazo Oscar.#

Ver'onica

Liz Flores
8 de marzo de 2011, 0:10

Tu poema me ha hecho sonreír de ternura. Es uno de los más dulces que te he leído en los últimos tiempos. Muy lindo. Elogio aparte recibe esa comparación tan acertada con el trébol, el nombre de Sara y la palabra amor. Debe ser que por eso que cuando encuentras un amor verdadero eres tan afortunado como encontrar un trébol de cuatro pétalos (sonrío). No destaco nada porque todo en conjunto con la foto y cita me ha encantado.

Un abrazo, Óscar.

Yessi
8 de marzo de 2011, 1:40

El amor con sus cuatro letras es capaz de hacernos sentir algo infinito en el alma.

Hermoso.

Un abrazo.

Marisol
9 de marzo de 2011, 2:44

Me ha parecido terriblemente tierno, Óscar, de una compleja sencillez, me ha recordado momentos de la infancia, o ya no sé si adolescencia, cuando buscaba tréboles de cuatro hojas, o contaba la distancia en la que caían los rayos por el sonido de sus truenos. Y ha sido como caminar con los pies desnudos por aquellos recuerdos.
La estrofa final es muy ingeniosa, al amor tiene que ser un trébol de cuatro hojas, y rojo, sí.
Un gran abrazo.

Clara Schoenborn
9 de marzo de 2011, 12:15

Querido Óscar: hoy tuve nostalgia de tu poesía y vine a buscarla. Me alegró el espiritu leer este poema, que es flotante y bello. Un abrazo.

Publicar un comentario