Blog poesía La luz de tu Faro

En memoria de Sara Álvarez, con Amor, devoción y ternura infinitas. Absorbí tu esencia, y ahora vives en mi poesía. Te devuelvo la vida con mis versos.

lunes, 12 de abril de 2010

La hélice del verbo


Mis labios diletantes agasajan tu vientre esmerilado
con la sevicia del beso.
Con esmerado puntillismo
acomodo mi saliva en la azarosa composición de tus lunares
y extraigo gemas del yacimiento mineral de tus muslos.

Exploro las galerías del placer subterráneo,
analizo la formación geológica de tus espasmos
a la luz del rocío
y me acurruco, ovillado, en la tibia oquedad de tu ombligo.

Te toco, y vuelan mariposas de mis dedos.
Me tocas, y cantan alondras en tu pelo.

Te hundes en mi boca
con la torsión de las lenguas
en la hélice del verbo.

Nuestro amor es la tempestad seminal que remeje las mareas,
el oleaje de la aurora,
la espuma del cantón.

Serigrafíame tu nombre en la espalda,
para que siempre que me acueste
sean tus labios mi canción.

Con tus besos atizas las ascuas en el brasero de mi pecho,
y al sellar mi boca con el metal candente de tus labios
me quemas la piel como el sueño incandescente de una luciérnaga
en el sofisma de la noche.

Abrazarte es como comprimir el universo en una cáscara de nuez;
un paseo clandestino por la falda de la luna.

© Óscar Bartolomé Poy. Todos los derechos reservados.

10 comentarios:

Fausto
12 de abril de 2010, 17:23

Para mi la idea de compartir lo íntimo con otra persona es algo sagrado, debe respetarse y tirar el miedo por la borda, hay que gozarse cada milímetro.
Me gusta ésta metáfora:
"Te toco, y vuelan mariposas de mis dedos.
Me tocas, y cantan alondras en tu pelo."

Creo que tus versos hoy han cambiado de tono y me gusta el brillo que tienen. La Eterna Tristeza siempre la llevas contigo, pero a tus versos le sientan bien cuando cambias de forma.

Saludos.

Cita Franco
12 de abril de 2010, 18:15

Buuuua Óscar! me encanta!! bendita la receptora de estos versos....
Es precioso en serio... plas plas plas

Un besazo

Cita

Isabel Moncayo Moreno
12 de abril de 2010, 18:24

Estoy de acuerdo con Fausto.
Como apasionada de la poesía sensual y erótica, el poema me resulta hermoso en todo ese esplendor de imágenes candentes con las que desde el título, ya incitan a una lectura amena y arrebatadoramente apasionada.
Me costaría destacar un verso, de hacerlo destacaría que me ha encantado los de la segunda estrofa, suelen las oquedades geológicas ser muy adptables a lo erótico. Así como la sexta estrofa también me ha gustado por lo original del grabado. También el cierre en ese paseo clandestino por la falda de la luna, es hermoso a rabiar. me encantan tus poemas eróticos.

un abrazo, Óscar

Liz Flores
12 de abril de 2010, 19:36

De pronto el cielo se puso más azul... qué lindo leerte en distinto tono.

Sugerentes y delicados versos perfilan esta hermosa poesía, resalto éstos que me encantron:

"Te toco, y vuelan mariposas de mis dedos.
Me tocas, y cantan alondras en tu pelo."

Por su erotismo me fascinó esta estrofa:

"Te hundes en mi boca
con la torsión de las lenguas
en la hélice del verbo."

Y por su infina ternura, ésta:

"Serigrafíame tu nombre en la espalda,
para que siempre que me acueste
sean tus labios mi canción."

Bellísimo poema, Óscar.
Enhorabuena.
Un abrazo.

lunilla
12 de abril de 2010, 20:27

Súblime tu poema Oscar!

armonia en tus versos que cantan por sí solos.
besos
Blue

Clara Schoenborn
12 de abril de 2010, 23:00

"Mis labios diletantes agasajan tu vientre esmerilado
con la sevicia del beso.
Con esmerado puntillismo
acomodo mi saliva en la azarosa composición de tus lunares
y extraigo gemas del yacimiento mineral de tus muslos."
Yo me quedo con éste y me lo llevo para colocarlo en mi corredor de la fama, es de antología.
Has escrito una colección de gemas que emociona e inspira. Maravilloso. Un abrazo con afecto.

Lisset Vázquez Meizoso
13 de abril de 2010, 4:00

No hay nada más maravilloso que descansar junto al ser amado y compartir sueños, especialmente después de haberse amado. No hay visión más bella que dos, abrazados, que se entregan al más puro de los sentimientos. Me encanta... es realmente precioso y la foto que adjuntas, acompaña perfectamente la imágen que me hacía en la cabeza mientras lo leía. Un abrazo.

Mayte S.
13 de abril de 2010, 19:46

Toda la viveza del sentimiento intenso y puro alzando voz entre versos encarnados de pasión y ternuras.

Gratísima lectura Oscar.

Serigrafíame tu nombre en la espalda,
para que siempre que me acueste
sean tus labios mi canción.

Hermoso signifiado de esta estrofa.

Siempre esencia.

Yoko-Tomoto
13 de abril de 2010, 20:05

Sonrío, me hace bien leeros en tono distinto y parece que no solo a mi.
Cuando leo poesía erótica, sobre todo la vuestra y la de mi bella Isabel, no puedo más que imaginar.
La magia debe ser que al leeros vuestros perciben sus propias emociones colgadas del recuerdo de la intimidad. Ese tipo de inspiración me seduce, me agrada mucho.

Me ha gustado tanto la intensidad y a su vez delicadeza con que describe la pasión del amor, qué maravilloso es hundirse en la hélice del verbo del ser amado. El verbo que graba sentimientos, ilustra al cuerpo y captura en su mayoría al recuerdo.

Con admiración y aprecio
vuestra Alejandra

Marisol
13 de abril de 2010, 22:39

Hoy nos regalas un poema erótico, donde dejas volar tu imaginación por pasajes apasionantes, aunque el estilo es claramente el mismo esmerado y limpio que usas en tus poemas melancólicos.
La fuerza de tus versos es impresionante, no dejas atrás las metáforas elaboradas.

Me gustaron en especial estos versos:
'Te hundes en mi boca
con la torsión de las lenguas
en la hélice del verbo.'
'Abrazarte es como comprimir el universo en una cáscara de nuez;
un paseo clandestino por la falda de la luna.'

Precioso poema.
Un gran abrazo.

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