Blog poesía La luz de tu Faro

En memoria de Sara Álvarez, con Amor, devoción y ternura infinitas. Absorbí tu esencia, y ahora vives en mi poesía. Te devuelvo la vida con mis versos.

domingo, 23 de agosto de 2009

Un préstamo a la eternidad


Donde no habita el hombre, ¿qué es el tiempo, sino la eternidad?
Nathaniel Hawthorne


El reloj me clava sus agujas cada vez que marca las horas
con un lacerante dolor que me atraviesa de derecha a izquierda,
trazando un círculo perfecto en mi pecho,
como un compás anclado en el mismo centro de mi corazón.

Son demasiados los minutos escritos en sangre,
demasiadas las horas vacías en el tonel de las Danaides.

El tiempo se me derrite entre los dedos como los relojes blandos de Salvador Dalí.

Tengo más años de los que tú ya nunca cumplirás.
El tiempo que viva sin ti será un préstamo a la eternidad.

© Óscar Bartolomé Poy. Todos los derechos reservados.

2 comentarios:

Marisol
29 de agosto de 2009, 5:12

El reloj es un elemento tortuoso, perverso, nos aleja de los momentos que hemos disfrutado y nos recuerda que el tiempo nunca se para.
El dolor y la lucidez me parecieron siempre incompatibles, pero tú, Óscar... tanto dolor y tanta lucidez para sufrirlo...
Y este verso:
'Tengo más años de los que tú ya nunca cumplirás.'
Es irrefutable.
Muchos abrazos.

Isabel Moncayo Moreno
2 de septiembre de 2009, 17:49

Creo que escribir es una forma de vivir, el poeta inventa realidades o escapa de ellas, en tus poemas siempre encuentro la imagen, tus palabras son siempre fértiles, incluso en el dolor, me extraña que no hubieras recortado la imagen de la persistencia de la memoria, con el reloj que cuelga del árbol sin ramas, en cambio elegiste el reloj blando que marca las 7 y una mosca está posada en él, tal vez algo signifique para ti. Los cuatro primeros versos del poema son verdaderamente contundentes y muestran el vacío, y siendo vacío, me pregunto por qué duele tanto, y duele y duele y duele, perdona parezco un tic tac.

Un abrazo, mi querido amigo, Óscar

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